EN BUSCA DE LA GLORIA
Unión de Mar del Plata se está jugando una importante posibilidad de llegar a jugar el Torneo Argentino A de fútbol la próxima temporada. Y sus ilusiones no son infundadas, posee el material humano y técnico para alcanzar el objetivo.
Por:Cortitas y al pie
A poco de ascender del Argentino C, de la mano de José Pintado y con jugadores emblemáticos como; Martín Cuevas, Jesús Collantes, Facundo Vega, y Esteban Alioto, entre otros, la idea de ir por más cundió en los dirigentes.
Se emprendió la heroica tarea de generar los recursos necesarios para afrontar está empresa; se consiguieron, tanto sea, hombres como el dinero necesario, se decidió buscar un cuerpo técnico que conozca la categoría y la dificultad de transitar por ella. Se recurrió a un hombre que pregona una filosofía de juego exquisita, partiendo de la base del respeto por la pelota y la idea de generar un fútbol fluido de toques cortos y precisos. El nombre de Marcelo Zwicker fue concensuado por toda la dirigencia, y fue el elegido.
Con un pasado de futbolista en el club Kimberley y una dilatada carrera como entrenador, dirigiendo a Cadetes de San Martín entre otros equipos, el “gancho” posee la experiencia necesaria para maximizar las posibilidades con que cuenta. Una de las primeras ideas fue la elección de los refuerzos, jugadores que conozcan su forma de trabajar y su dialéctica de juego. No fue extraño saber que se sumaban a este proyecto jugador de la talla de los hermanos Di Bartolo, Leonardo Serfaty, Aldo Suárez, Damian Luengo, entre otros. Con el plantel completo, se decidió jugar en la Villa de Kimberley, mas precisamente en la cancha José Alberto Valle, y se desestimo el estadio José María Minella por considerarlo excesivamente grande para cobijar a la familia de Unión.
En septiembre del 2008, este nuevo Unión se embarco en esta gran ilusión. En la primera parte del campeonato supieron demostrar que era un equipo de grandes jugadores que interpretaron a la perfección el mensaje de su técnico; Alejandro Aguirre y Federico Moreira supieron desplegar un fútbol vistoso, vertical, rápido, preciso, y contundente. En el medio campo el despliegue de Esteban Alioto, y Damian Luengo fueron claves a la hora de la recuperación del balón. Leonardo Serfaty aportó la experiencia en la categoría y su contundencia goleadora, muy bien acompañado por un histórico como Martín Cuevas. En la defensa, las proyecciones de Mariano Felice y Cristian Castagnino resultaron fundamentales a la hora de perforar las defensas cerradas que plantearon los rivales que visitaron Mar del Plata, en la zaga central Juan y Pablo Di Bartolo cumplieron con aquella vieja premisa del futbol que es quitar y saber entregar el balón a un compañero para generar una salida limpia y clara. No le fue difícil entender este concepto a los hermanos, dado que ya conocían a Zwicker de Cadetes de San Martín.
Este equipo completo una primera fase de manera contundente y eso le permitió clasificarse a la etapa semifinal del torneo varias fechas antes del final, a pesar de que estuvo siete partidos sin victorias. Esto último no le permitió terminar al frente de su zona, algo que merecía por lo hecho durante toda la fase de grupos.
A poco del comienzo de está fase semifinal, donde compiten equipos de; Comodoro Rivadavia, Madryn y, el ya clásico rival de la región, Grupo Universitario.
Unión ha logrado un empate frente a Huracán de Comodoro en su visita al sur y una trabajosa victoria ante Deportivo Madryn de local.En un partido vibrante venció a Grupo Universitario,con este triunfo las ilusiones de ascenso son un sueño al alcanse de la mano.
Unión que practica un fútbol lucido, vistoso, generoso, que enseña el camino a los grandes logros, a las grandes victorias, a las grandes hazañas, que motivan al espectador a presenciar sus partidos.
Unión va en busca del ascenso, para demostrar que con trabajo consensuado, persistente, y profesional, los objetivos pueden cumplirse. Le quedan tres fechas; visita a Grupo Universitario de Tandil, visita a Deportivo Madryn, y en la última fecha Huracán de Comodoro será su último rival, soñando con ya estar clasificado a la ronda final. Los sueños, sueños son, y Unión tiene todo para que se trasforme en una realidad.
Fútbol | Unión de Mar del Plata
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